Conoce con Zetelek en este artículo, todas las ventajas e inconvenientes de los sistemas de calefacción por suelo radiante.
Una de las elecciones más importantes en nuestro hogar es elegir el tipo de calefacción. El suelo radiante es uno de los más eficientes y utilizados en los países del norte de Europa.
La diferencia más notable respecto a la calefacción por radiadores es que la temperatura se reparte de una manera más uniforme y homogénea por las diferentes estancias de la vivienda. Es decir, que el calor no se acumula en el propio radiador, lo cuál hace que alcanzar la temperatura deseada sea mucho más rápido, de modo que nos ayuda a ahorrar energía.
Estos sistemas conservan más el calor que los radiadores convencionales y además no necesitan alcanzar una temperatura tan alta para ser igual de efectivos o más.
Opiniones del suelo radiante
Desde el punto de vista del equipo de Zetelek como expertos en climatización y Servicio Técnico Oficial, diríamos que las principales ventajas del suelo radiante frente a los radiadores convencionales son el mayor confort térmico y el ahorro energético, que puede suponer hasta un 20%.
Sin embargo, a pesar de que las ventajas son indiscutibles, también encontramos una serie de inconvenientes como son: su mayor precio de instalación y su dificultad de instalación, aunque esto deja de ser un inconveniente si lo dejas en manos de profesionales como el equipo de Zetelek.
Además, este tipo de instalación, al igual que las convencionales, requieren de un mantenimiento periódico y revisión para su correcto funcionamiento.
¿A qué temperatura poner el suelo radiante?
Lo ideal es que cuentes con un termostato mediante el cuál puedas programar la temperatura de tu calefacción en las diferentes estancias y si además cuenta con wifi, podrás hacerlo directamente desde el móvil, con las innumerables ventajas que eso te ofrece.
De este modo puedes poner directamente a través del termostato, la temperatura que seas tener en tu vivienda. Lo recomendable es que sea de unos 20ºC, ya que es más que suficiente para mantener un nivel de confort óptimo.
Para alcanzar esa temperatura en tu vivienda, el agua caliente circulara por el circuito del suelo radiante a unos 30ºC, pudiendo llegar hasta los 45ºC.
Tipos de suelo radiante
En los sistemas de suelo radiante podemos encontrar tres tipos: eléctrico, por agua caliente o por aerotermia. Cada uno de ellos tiene las características propias que les otorga la fuente energética que utilizan para funcionar.
Suelo radiante eléctrico
El suelo radiante eléctrico funciona gracias al suministro de electricidad. Este no necesita de ningún otro aparato que le suministre energía para generar calor. Sólo necesita una resistencia eléctrica que convierta la electricidad en calor. Su instalación es muy sencilla.
La principal ventaja del suelo radiante eléctrico es que el calor que emite es inmediato, es decir, se emite de forma directa y necesita menos tiempo de encendido. Esta es una de las mayores ventajas del suelo radiante eléctrico frente al suelo radiante por agua caliente, aunque el suministro eléctrico como tal sea más caro.
Suelo radiante por agua caliente
El suelo radiante por agua caliente funciona gracias al Agua Caliente Sanitaria ACS que circula por su sistema. La instalación consta de un circuito de tuberías que conectan con una caldera de gas, que se encarga de calentar el agua y distribuirla por toda la vivienda.
La principal ventaja del suelo radiante por agua caliente es que necesita mucha menos energía para transmitir el calor que a través de los radiadores tradicionales.
Suelo radiante por aerotermia
El suelo radiante combinado con aerotermia proporciona un elevado rendimiento energético consiguiendo importantes ahorros de energía. Esta combinación de sistemas reúne las ventajas de los dos sistemas, la buena eficiencia de la bomba de calor aerotérmica y la agradable distribución de calor del suelo radiante.
La aerotermia funciona mediante una bomba de calor, que es una tecnología que extrae la energía presente en el aire. Esa energía puede ser extraída del exterior para cederla al interior de la vivienda (calefacción) o extraerla del interior para expulsarla al exterior (refrigeración). Además, si contamos con un depósito de acumulación o con una caldera mixta, también sirve para la producción de agua caliente sanitaria.
La versatilidad de la bomba de calor aerotérmica le permite funcionar en modo calefacción, cediendo el calor obtenido al circuito de agua y distribuyéndolo a través de toda la vivienda. Y también tiene la opción de refrigeración, por la cual transfiere agua fría al circuito de agua.
Esperamos que nuestro artículo sobre el suelo radiante, sus ventajas e inconvenientes, así como los diferentes tipos que encontrarás en el mercado, te haya servido de utilidad.
En Zetelek como Servicio Técnico Oficial de las marcas de referencia, estaremos encantados de resolver todas tus dudas, y si estás interesado en saber más sobre el mundo de la calefacción, diferentes tipos de calderas y consejos y trucos para el mantenimiento del confort encontrarás mucha más información en nuestra página de publicaciones.
Te esperamos.